Mil mariposas revoloteaban, majestuosas, sobre aquellos gatitos que jugaban a alcanzarlas. Y los besos y las risas con sus maullidos se mezclaban...
Y las once primaveras que los gatos celebraban
eran de Laura y María, eran de María y Laura.
Nadie faltó al festival, nadie osó perderderse nada.
Regalos llenos de luz y un ovillito de lana.
Al final salió la luna, con su estola plateada
y un gatito, enamorado, junto a ella se quedaba...
Felicidades...
Me encanta la tarta y el poema... atchiuuuu! (perdón, mi alergia)
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